En los últimos años hemos presenciado algún hecho delictivo, conocemos a alguien que fue víctima de algún delito o nosotros mismos hemos sido afectados por la violencia en nuestro Estado.
El tema de seguridad pública, sin duda, desde hace tiempo, sigue siendo la principal preocupación de los sonorenses. Desde ser objeto de robo de nuestras pertenencias que con tanto esfuerzo nos cuesta adquirirlas, hasta salir lesionado en nuestra integridad física e incluso perder la vida, son cuestiones que atraen nuestra atención continuamente.
Diversas estadísticas indican un incremento en los robos y asesinatos en nuestras ciudades. Hechos que no pasaban y nos sorprenden las leemos en los diarios, noticias o redes sociales.
Esta violencia, que podría pensarse que es un asunto de la vida privada de las familias, impacta en la autoestima de las víctimas, que no solo son mujeres, también hablamos de jóvenes, niñas y niños, que aprenden patrones de conductas de violencia. Un acto que la mayoría no dejará de repetir, dentro y fuera de casa.
Es importante que conozcas esta información, que la reflexiones con las personas de tu familia, amigos, vecinos.
Cómo sociedad debemos dejar de ser omisos, enseñar a los nuestros que la violencia no es “normal”; que deben pedir ayuda si han sido violentados.
Hacer del conocimiento a las autoridades, los casos de violencia intrafamiliar que tengamos a nuestro alrededor, no es un asunto privado, es un asunto de todos e impacta la vida e integridad de nuestros niños, niñas, mujeres, hombres, niños, y adultos mayores.