Nuestra sociedad se encuentra inmersa en una situación crítica debido a la inseguridad que prevalece en el país y en Sonora. Día a día nos enteramos de hechos o situaciones donde la delincuencia atenta contra diversos sectores de la sociedad, sin importar género, edad o nivel socioeconómico. La violencia está presente en hogares y en espacios públicos, atentando contra múltiples grupos vulnerables, y, percibimos que, de no hacer nada, no terminará pronto.
Ante esta situación, resulta urgente atender y solucionar las diversas expresiones de violencia e inseguridad que persisten en Sonora, a través de la suma de esfuerzos, voluntades y recursos de los tres órdenes de gobierno, de la sociedad organizada y de las familias y ciudadanía.
No debemos pasar por alto que una función primordial, en cualquiera de los tres niveles de gobierno, es proporcionar seguridad a los ciudadanos y hacer valer un Estado de derecho a través de sus instituciones encargadas de brindar seguridad así como aquellas que tienen por obligación procurar e impartir justicia.
Desde los Comités Ciudadanos de Seguridad Pública de Sonora y Hermosillo buscamos promover buenas prácticas que nos permitan vivir mejor, en una sociedad más segura. Creemos que la seguridad y justicia son imprescindibles para que podamos ampliar nuestras opciones de desarrollo de forma segura y libre.
Gran parte de nuestro trabajo consiste en el análisis y difusión de información oficial y verificada sobre cómo se manifiesta la inseguridad en Sonora y Hermosillo, siendo el presente informe parte de ello.
Consideramos pertinente hacer una revisión del estado que guarda la seguridad y justicia en Sonora a mitad de año. Con base en la información oficial disponible, damos cuenta de la evolución de la incidencia delictiva enfocándonos en los delitos de alto impacto en Sonora y Hermosillo, estableciendo comparaciones con el resto del país.
Hemos incluido también información estadística sobre la procuración e impartición de justicia en Sonora, la cual nos brinda un panorama del trabajo realizado por las instituciones responsables de esta tarea.
Conscientes de que en la base de las instituciones de seguridad pública se encuentran nuestros policías, presentamos información sobre sueldos y salarios que perciben, así como la situación en torno a las evaluaciones de control y confianza.
Finalmente, presentamos nuestras conclusiones que se derivan de la información analizada y contenida en este informe.
Por último, queremos agradecer a nuestros lectores e invitarlos a participar de manera activa en la resolución este tema fundamental para el presente y futuro de todos. La seguridad y libertad de la ciudadanía es nuestro deber más inmediato.
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